Esta consigna es una de las que nos convoca al Paro Internacional de Mujeres este miércoles 8 de marzo desde las numerosas y diversas asambleas autoconvocadas en más de 40 países, y que en Argentina se han producido en todo el país en las últimas semanas, como muestra del alcance expansivo de las resistencias que inaugura ese «nosotras» abierto e inclusivo.
El 8 de marzo es una fecha de conmemoración histórica de las luchas y movilizaciones del movimiento de mujeres y feministas contras las injusticias, desigualdades y violencias que sufrimos las mujeres en todo el mundo. Marchar y manifestarse en el espacio público ha sido una de las maneras de exigir el fin de todas esas violencias: marchamos por el fin de los femicidios y la violencia sexual, por el fin de las redes de trata para la explotación sexual de mujeres y niñas, por la igualdad de salarios y por el fin de la discriminacion laboral, por la real democratización del trabajo doméstico y distribución de las tareas de cuidado, por el fin de la misoginia en los medios, pedimos por el aborto legal, seguro y gratuito.
Entre las 12 y las 13hs las mujeres de todo el país nos sumamos al ruidazo y cese de actividades en nuestros lugares de trabajo, en nuestras casas y en las plazas con reuniones de discusión acerca de las razones de esta movilización. La feminista norteamericana Zillah Eisenstein ha dicho que «Hay tantas formas de hacer huelga, como formas del trabajo de las mujeres existen.»
En la ciudad de Buenos Aires la marcha está convocada desde las 17hs. en la Plaza de los Dos Congresos hacia la Casa de Gobierno, en distintas plazas y espacios públicos de otras ciudades del país también habrá marchas y actos, la agenda completa es imposible de reproducir pero pueden encontrarla en diferentes medios locales y nacionales o a través de las redes sociales.
Entonces, «si nuestras vidas no valen», el #8M #NosotrasParamos.
